Queremos un rio limpio. Segunda parte
En septiembre se ha ido casi todo el mundo a trabajar, y yo que me aburro, me dedico a hacer cosas como limpiar el río y su entorno.
Es una costumbre antigua, que empecé con mi hijo, y la he mantenido ya varios años.
Se que un día me cansaré, llevo cientos de bolsas de plásticos recogidos del rio y de huertas abandonadas, se nota y mucho en las zonas por donde he pasado.
Pero los que tiran la mierda no lo notan, ni cuando esta limpio ni cuando está sucio.
Los malos no descansan.