La huerta del vecino
Cotillear la huerta del vecino es un pasatiempo indoloro e inocente. ¿Qué está plantando? ¿por qué sus cebollas siempre van mejor que las mías? debería poner algunas aromáticas, que envidia de terreno tiene.
Cuando voy hacia mi huerta suelo pasar por la Gerardo y Gema, y me hago preguntas, sobre todo a la vuelta, ya que es de subida y me viene bien un pequeño respiro.
Me apoyo en la barandilla y desde allí veo esta fotografia. Será que soy simple pero a mi este me parece un paisaje muy chulo.
Ya no necesito viajar, cotillear la huerta del vecino satisface a menudo mi curiosidad sobre las cosas de la vida.