Cómo hacer un cuaderno de campo. Primera parte.
¿Qué es un cuaderno de campo?
El cuaderno de campo fue durante mucho tiempo compañero inseparable de viajeros y naturalistas. Antes de que la fotografía y el video se impusieran por su inmediatez, los naturalistas describían con sus dibujos y textos las especies, paisajes y fenómenos naturales que observaban.
Hoy en día tenemos cámaras digitales o smartphones que facilitan más que nunca la tarea de registrar con fidelidad aquello que vemos. Podemos subir nuestras observaciones a comunidades, foros o apps, todo desde nuestro propio teléfono, y desde allí compartirlo casi instantáneamente al resto del mundo.
Entonces, ¿qué sentido tiene hoy en día hacer un cuaderno de campo?
Doble página de uno de mis cuadernos de campo, con fotografía, dibujos y texto de la Marjal dels Moros y Ludiente.
Tipos de cuadernos de campo
Los cuadernos de viaje, diarios fotográficos o libretas de bocetos han sido una necesidad para algunas personas creativas de diferentes ámbitos que buscaban registrar sobre un soporte físico sus procesos creativos o vivencias.
El fotógrafo inmerso en un reportaje a largo plazo, anota en su cuaderno con quién habla o a quién fotografia, o quizás una lista de posibles imágenes para completar su reportaje. También puede utilizar el cuaderno o diarios como el soporte para sus proyectos o fotografías, un ejemplo perfecto que me viene a la mente es Juanan Requena, no dejéis de pasar por su web a poco que os interese la creatividad y fotografia.
El viajero, a menudo ha registrado a modo de diario personal o antropológico aquellos lugares y gentes por los que pasaba. Un ejemplo de ello sería Sam Scott, el pintor americano y sus cuadernos de la Amazonia.
Y como no, el/la urbanita que viaja cada día en tren para ir o volver al trabajo y de camino hace bocetos de los viajeros o paisajes que cruza también él/ella está en cierto modo haciendo un cuaderno de “campo” dentro de su hábitat, que es la ciudad.
Pero el cuaderno de campo del que te hablaré aquí es la libreta de notas del naturalista. En ella un/a naturalista anota aquello que observa en la naturaleza: especies, paisajes, conductas, rastros, encuentros, mapas.
Páginas de un cuaderno de campo donde dibujé un macho de cabra montés que encontré muerto.
¿Por qué hacer un cuaderno de campo?
A día de hoy, el cuaderno de campo sigue siendo una herramienta muy útil para el naturalista que trabaja en el terreno, sobre todo si la llevamos encima y tomamos notas in situ. Si en el momento de observar algo lo anotamos, quedará registrado y no se nos olvidará. Esas anotaciones nos pueden aportar a posteriori información para nuestros propios proyectos o para colaboraciones con otras organizaciones.
Si sabes dibujar o tienes ilusión por aprender, descubrirás que es una actividad muy diferente a fotografiar: bajas el ritmo, y pones toda tu atención en aquello que estás observando, te fijas en cada detalle, sin distracciones ni parámetros a regular de ningún aparato, a lo sumo prismáticos o telescopio. Una actividad bastante relajante.
Los lápices de colores de mis hijos, un fechador, rotuladores y acuarelas que he usado para mis cuadernos de campo.
Cuando pones tus sentidos en observar y dibujar lo que está sucediendo todo cambia y eres capaz de darte cuenta de detalles que te pasarían desapercibidos. Con una fotografia, otros parámetros como exposición, foco y composición acaban llevándose el protagonismo y nuestro capacidad de observación disminuye.
Esa ralentización del proceso de observación y registro de los datos, redunda de forma positiva en tus observaciones, y además te permite disfrutar más del momento.
Para los poco enamorados de la tecnología como yo, tomar notas es técnicamente lo más simple del mundo, no usa baterías ni electricidad, es barato, ligero y duradero, no necesita software y el hardware puede ser tan simple como un cuaderno y un lápiz.
El objeto final que obtendremos será un recuerdo para toda la vida lleno de notas, esquemas, dibujos, fotografías mapas o reseñas..un objeto físico y real, realizada a mano, imperfecto, único. Un reflejo maravilloso de aquello que vivimos en algún momento en la naturaleza.
¿Quién puede hacer un cuaderno de campo?
La respuesta es obvia: cualquiera con tiempo y ganas. Hemos de tener presente que como todo en la vida, hacer nuestro cuaderno de campo nos llevará algo de tiempo. Tiempo que podemos sacar por ejemplo de estar sentados delante de la tele o el smartphone.
No obstante hay un grupo de edad al que esta actividad del cuaderno de campo le viene especialmente bien: l@s niñ@s.
Mis primeros cuadernos de campo fueron iniciativa propia. Cuando era un niño teníamos dos cadenas de televisión, no había oido hablar de national Geographic o la BBC, pero los programas de El Hombre y La Tierra entraban cada semana en casa, incluso los veía a escondidas desde la puerta del salón cuando empezaban tarde o estaba castigado.
En aquellos programas Félix Rodriguez de la Fuente siempre utilizaba como referencia para hablarnos del animal en cuestión de aquellos maravillosos cuadernos de campo con fantásticas ilustraciones.
Muchos años más tarde, siendo ya padre por segunda vez comencé con mi hijo dos cuadernos de campo. Durante el verano decidí que ya estaba bien de asignaturas y nuestros deberes del verano sería un proyecto de biología. Proyecto que requería grabar, observar, andar por el camino, anotar o buscar en guías de campo.
Registramos en nuestros cuadernos animales, plantas y pequeños experimentos que íbamos haciendo, descubriendo la fauna de nuestro pueblo. Las fotografiaas eran cosa mía, pero los montajes de la camara trampa cosa de los dos.
En estos enlaces podeis ver aquellos cuadernos:
Lo que empezó como un proyecto para sustituir los aburridos deberes de verano, acabó siendo una de las experiencias más bonitas y gratificantes que he tenido como naturalista y padre.
Por tanto no puedo sino recomendaros a aquellos que sois madres y padres esta actividad con vuestros hijos. Que no os paren los medios disponibles, la inexperiencia o el no saber hacerlo, no importa lo grande o pequeño del proyecto, o su elaboración más o menos compleja, lo más importante es la vivencia mientras lo vais haciendo, y la elaboración de algo físico y real que durará muchos años.
Los niños son el futuro, la educación es la clave para cambiar nuestra manera de estar en el mundo, y el primer paso, es conocer nuestra casa y a nuestros vecinos salvajes. Hacer un cuaderno de campo nos ayudará a ell@s conozcan y entiendan nuestra naturaleza más cercana.
¿Cuándo hacer el cuaderno de campo?
Hay dos opciones básicas y todas las versiones intermedias.
Puedes llevar al campo tu cuaderno y apuntar in situ las observaciones, o volver a casa y anotar entonces lo recordado, dejando un hueco para fotografías o dibujos posteriores.
Si tomas notas en campo debes ser rápid@ y llevar un equipo ligero y simple que no te dé pereza sacar. Aquí prima lo práctico antes que lo artístico.
Una ventaja de este sistema es que no olvidarás lo observado, una desventaja es que tus observaciones deberán ser esquemáticas y rápidas para no hacer cada observación o parada muy tediosa. Si tienes tiempo (algo a lo que aspiro) yo lo haría al menos en parte así, sobre todo si estás haciendo un seguimiento alguna especie.
Durante la realización de nuestros primeros cuadernos tenía poca prisa y por tanto algunos dibujos los hice en campo.
Encontré este cráneo de zorro en el Buey Negro, después de limpiarlo lo dibujé y lo comparé con una guía de campo para poder identificarlo con seguridad.
Si eliges la opción de escribir el cuaderno de campo al volver a casa, te recomiendo hacerlo cuanto antes, sin dejar pasar más de un día, sino es fácil olvidar los detalles y los recuerdos se diluirán.
La ventaja de este método es que puedes esmerarte más en su realización, copiar dibujos de las fotos que hayas hecho o pintar tranquilamente, digamos que con este método hay más espacio para desarrollar el artista que llevas dentro.
Los dos métodos son válidos y según el proyecto que hagas, tu manera de hacer las cosas o tus habilidades, te apetecerá más desarrollarlo de una manera u otra.
Uno de los experimentos fue observar las diferentes fases en la metamorfosis de la rana común. En este caso las fotografías y dibujos los hicimos después y las anotaciones las hacíamos en campo.
Equipo para hacer un cuaderno de campo
¿Puedes comprar un lápiz, goma y un cuaderno? ya puedes empezar a hacer un cuaderno de campo, de verdad que no te hace falta más.
Si te apetece le puedes añadir lápices de colores para hacerlo mas bonito o atractivo, sobre todo con niñ@s. El color forma parte importante de la ilustración y el resultado final será más atractivo para ellos.
A partir de ahí, puedes complicarte todo lo que quieras, según el equipo que tengas o quieras adquirir podras hacer unas u otras observaciones.
Como soporte para los dibujos, fotografías acuarelas, plumas pegadas, etc.,..te aconsejo un cuaderno liso. Si lo vas a llevar al campo que tenga un tamaño comedido, sino te hartarás y no lo sacarás nunca.
Los cuadernos que he hecho hasta ahora tienen un tamaño aproximado de 15x20 cm. Con este tamaño puedo pegar la mayor parte de las plumas que encuentro, pegar fotografías 10x15 y hacer dibujos o esquemas.
Las copias fotográficas de tamaño 10x15 son ideales para mis cuadernos, pequeñas y económicas, me permite hacer cuantas necesito y admiten algo de texto para pies de foto o notas.
Para utilizar acuarelas necesitarás un tipo especial de papel con más gramaje, es necesario para que no se rompa o estropeen las hojas. Los modelos de moleskine art son los que yo he usado en varias ocasiones.
Para lapices de colores o pegar fotografias no necesitas un grosor tan elevado y te puedes apañar con cuadernos más económicos.
Siendo naturalista es casi seguro que tendrás ya algún tipo de aparato óptico para observar animales, lo más normal son los prismáticos. Sin entrar a valoraciones de marcas te diré que en óptica normalmente obtienes lo que pagas y unos buenos prismáticos te pueden durar toda la vida o casi.
Unos buenos prismáticos en el rango de 8x32 a 10x42 te permiten observar aves o mamíferos lejanos, así como lagartijas o anfibios sin tener que acercarte a ellos y asustarlos.
Si disfrutas del dibujo y lo tuyo es la ilustración, no necesitas una cámara fotográfica, te ahorrarás dinero que podrás emplear en materiales como buenos cuadernos o acuarelas o quizás en unos prismáticos de más calidad.
La cámara fotográfica no es esencial pero te permitirá registrar rápidamente animales para dibujarlos a posteriori, si sabes fotografiar y ya tienes el equipo aprovéchalo, pero recuerda siempre que la observación en campo es un fin en si mismo, salir a hacer fotografías es muy diferente de salir a observar y tomar alguna fotografia de referencia.
Si ya sabes fotografiar y tienes equipo puedes usar las fotografías que tomas en campo como referencia para dibujos o directamente hacer copias y pegarlas en el cuaderno. Este es un método que a menudo he utilizado por su comodidad.
Este fin de semana en Bronchales fotografíe un zorro de buena mañana, encontré un desplumadero con plumas de un pito real y marcas de ciervo y corzo.
La cámara trampa te enseñará un mundo oculto a los humanos. Los mamíferos son difíciles de ver en la mayoría de los sitios, así que una cámara de fototrampeo te proporcionará observaciones imposibles de conseguir de otro modo.
Una cámara de fototrampeo de gama media está por los 100€, puedes ver una review que hice de la DL-501 de Usogood o quizás optar por las browning, de precio más elevado pero muy fiables y con un buen sonido también.
Una técnica que he usado en nuestros cuadernos de campo es extraer jpegs de los videos e imprimirlos para el cuaderno. Obviamente nunca tendrá la misma calidad que una fotografia pero cumplirá perfectamente el requisito de ilustrar nuestras observaciones.
En este montaje de cámara trampa grabamos cuatro machos de corzo distintos, años más tarde dejamos la cámara allí 6 meses, nuestro montaje más largo. La fotografía del corzo es un fotograma extraído de un video con resolución Full HD (1920x1080).
En mi caso cuando hicimos nuestro primer cuaderno ya tenía unos buenos prismáticos, cámara fotográfica y una cámara trampa. Todo ello nos permitió aumentar muchísimo nuestras observaciones, disfrutar observando algunas especies y la riqueza de los cuadernos.
Prismáticos y cámara trampa, ambos te permiten ampliar tus observaciones muchísimo.
A todo lo anterior puedes añadirle lo que se te vaya ocurriendo o necesites: regla para medir huellas, plumas etc.,..una lupa para observar cosas en detalle, telescopio para observaciones muy lejanas, etc,etc,..
Pluma y egagrópilas de lechuza común. Una regla básica y pequeña te ayuda a identificar rastros.
Pero recuerda, lo más importante es definir un proyecto concreto y utilizar las herramientas necesarias, no más. Si vamos al campo con los prismáticos, la cámara de fotos y la de fototrampeo, la regla, un trípode y un cuaderno lo más fácil es que lo hagas todo a medias y nada bien.
Mi consejo es hacer salidas al campo con uno o dos objetivos concretos. Si vas a observar aves con un telescopio puedes perfectamente centrarte en eso y en hacer anotaciones en tu cuaderno.
Pero no te lleves la cámara trampa tambien para buscar rastros y colocarla a ultima hora, es mejor que esa salida la hagas otro día y te centres en hacerlo bien.
Conclusión
Bueno naturalistas, hasta aqui la primera entrada dedicada al cuaderno de campo. Espero que os animéis a probarlo, especialmente si sois mamas o papas. Al principio intimida un poco, pero pensad en hacer algo personal para vuestro propio recuerdo y para vivir la experiencia, estoy seguro que os gustará el resultado y lo disfrutareis mucho.
En una segunda parte os enseñaré páginas de nuestros cuadernos de campo con ideas concretas y también algo de inspiración para vuestros propios cuadernos.
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