A vueltas con el cuaderno de campo
Estos días he recurrido a uno de mis cuadernos de campo para dos asuntos. Me ha gustado volver a verlo y leer algunas entradas, mi hijo no se acordaba de muchas cosas. Creo que los cuadernos perdurarán. Las fotos que tengo en el disco duro nadie las verá, este blog se perderá, pero los cuadernos son un buen recuerdo, y no necesitas electricidad para verlos, asi que puedes entretenerte en caso de apocalipsis.
No hay duda que necesitas algo de tiempo para hacer un cuaderno de campo. Quizás no he hecho más por eso. Pero escribir, dibujar, y pegar fotos, hacer algo fisico tiene algo que me atrae. No sabría explicarlo ¿asienta lo que he visto? ¿me hace reflexionar? ¿aumenta mi capacidad de estar en el momento? ¿desarrolla habilidades perdidas? ¿me relaja?
Parece que últimamente en los colegios se están dando cuenta de que estudiar sin papel y libros no es tan perfecto como parecía, y quieren volver al papel. Parece ser que activas tu cerebro de forma distinta.
Empecé de nuevo a escribir el blog porque echaba de menos escribir y fotografiar, y por el mismo motivo me estoy planteando empezar un nuevo cuaderno de campo, porque lo echo de menos. Y acabo de ver que terminé en 2024 mi cuaderno de campo más largo, el diario de la huerta, no hace tanto.